Amigos, inicio una serie de notas relacionadas a lo que mas me preocupa (y de a poco me ocupa) en este momento y hacia el futuro: la gran crisis global que se avecina, y que segun lo que vengo leyendo e investigando, cambiará para siempre nuestras vidas y las de futuras generaciones. Intentaré lograr un equilibrio entre calidad y velocidad, para tratar de transmitir todo lo que vengo absorbiendo y pensando, tarea para la cual me voy a apoyar en otras personas que seguramente tienen mas conocimientos y claridad que yo. Tengo el atrevimiento de escribir sobre estos temas porque creo que todos los que estamos viendo las muy posibles graves consecuencias de esta situación, tenemos la obligación de difundirlo, a riesgo de ser imprecisos, desprolijos, de equivocarnos en alguna opinión. En definitiva estará en cada uno la posibilidad de profundizar los temas, investigar, contrastar con otras opiniones, y plantearse o no tomar determinadas acciones. Dado que Colaboras.com tiene cerca de 50.000 visitas mensuales, y que las grandes redes sociales permiten una amplia difusión, espero llegar con estos temas a cada vez mas gente. Vamos al punto. Como trato de describir mas estructuradamente en el problema "Gran crisis mundial del siglo XXI", diferentes crisis están confluyendo, con bastante coincidencia temporal, aunque tal vez a ritmos distintos, en estos años y los proximos. Las tres grandes crisis que creo están confluyendo son: la crisis financiera internacional (que en el fondo creo es economica y del capitalismo), la crisis de agotamiento de recursos naturales (petroleo y derivados, bosques, recursos hidricos, etc, con su consecuente crisis energética) y la crisis que está provocando el calentamiento global, que plantea segun expertos hasta la desaparición de la especie humana. Cualquiera de las tres crisis es suficientemente grave como para causar grandes cambios en nuestra sociedad, imaginense el desafio que implica tres grandes crisis confluyendo casi simultaneamente. Y a esto se pueden sumar otras crisis, no menores, y diversas crisis locales en diferentes paises o regiones del planeta. El lado negativo de esta situación, segun mi vision personal y de muchos a los que he leido, es que ni la clase politica, ni el sector empresario, ni la sociedad en general, entienden lo grave de la situación, ni muestran signos de voluntad para afrontar los grandes cambios que se necesitan. Algunas organizaciones del sector social son las que plantean estos temas, pero evidentemente no alcanza el esfuerzo, ya que requiere acciones consensuadas, coordinadas por todos los sectores, y a gran escala. El lado positivo, es que el principal camino para sobrellevar las distintas crisis, en gran medida, es una sola medicina: el DECRECIMIENTO. A riesgo de ser tildado de loco, de hereje, de desestabilizador, de ir en contra de la corriente, en otras notas profundizaré en este concepto. Básicamente el decrecimiento como idea, plantea un escenario donde podamos vivir mejor, con mucho menos. Donde vivir mejor no esté atado como ahora, a consumir mas, sino mas bien, todo lo contrario. Donde ya no sea necesario un constante crecimiento del PBI, donde se manejen otras variables de desarrollo humano, donde haya mas eficiencia en la utilización de recursos naturales y energéticos. Un escenario donde respetemos el equilibrio de la naturaleza, y donde no saquemos mas de lo que la tierra nos puede dar. Decrecimiento que puede ser planificado y gradual, siempre buscando soluciones equitativas a nivel social, o puede ser brusco e inesperado para la gran mayoría, ya provocado porque el sistema financiero colapse, porque los recursos entren en una etapa de agotamiento rápido, o porque el clima entre en una situación extrema e irreversible. Decrecimiento que implicará acciones de mitigación a nivel global por parte de estados y organismos internacionales, y acciones de adaptación, donde los individuos y grupos humanos tomarán decisiones para adaptarse a los cambios que finalmente sean forzados (muchos de los cuales ya están ocurriendo). Estimados amigos, esta nota tiene como objetivo abrir el juego, poner sobre la mesa este gran problema, que necesariamente por un lado hay que profundizar, monitorear, entender, difundir, y por otro habrá que ir tomando acciones de mitigación y adaptación al nuevo escenario, que en mayor o menor medida, será segun mi pensamiento bastante distinto al de las ultimas décadas. Saludos Fernando |